12.12.2012 - Tigre llegó a un lugar impensado y se marchó de manera insospechada. Después de empatar la primera final de la Copa Sudamericana en Victoria (0-0) viajó a San Pablo (Brasil) para definir el título y, desde entonces, las cosas se fueron oscureciendo.
Con el partido 2-0 a favor de los locales (Lucas ´22 y Osvaldo ´28), Tigre no salió a disputar el segundo tiempo después de confusos incidentes en los vestuarios de entretiempo y el árbitro Enrique Osses dio por terminado el juego para convalidar el título brasileño.
El clima se puso espeso ya en el partido de ida, cuando Luis Fabiano agrede a Donatti y es expulsado. Para la revancha, el mismo martes, cuando la delegación argentina llegó a San Pablo y los directivos locales no permitieron que los jugadores de Tigre reconocieran el césped del Morumbí. Al día siguiente (miércoles), el micro argentino sufrió la hostilidad de hinchas brasileños y hoy (jueves), durante el partido, se desató el escándalo.
Un cruce verbal entre Lucas (Sao Paulo) y Orban (Tigre) luego del pitazo final del primer tiempo terminó de caldear los ánimos. Pasados unos minutos (de entretiempo), auxiliares de Tigre salieron al campo de juego a denunciar agresiones y una zona liberada en los camarines.
Inmediatamente Pipo Gorosito (Tigre DT) lo confirmó en el césped: "Hay jugadores lastimados. Los patovicas grandotes de San Pablo nos pegaron y uno de ellos sacó un revolver. Entró las policía y nos mató a palos… Sacaron dos revólveres en el vestuario. Eso es San Pablo, son cagones, mano a mano no se la bancan. No se juega más".
El encargado de seguridad de Tigre contó luego que la policía le puso un arma en el pecho al arquero Albil y testigos hablaron de sangre en las remeras de los jugadores.
Los brasileños terminaron dando la vuelta olímpica. Luego, la Conmebol le otorgó la Copa Sudamericana (2012) a Sao Paulo.
Si bien son de esperar sanciones para ambas instituciones, la manifiesta problemática de seguridad que presentan los estadios brasileños (sobre todo en partidos internacionales) no cae bien en la víspera mundialista (?)
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2 comentarios:
En el pasado los equipos argentinos se caracterizaban por ensuciar los partidos si no podian ganarlos, pero creo que aun si hubiese habido algo de eso, nada justifica una agresion de este tipo a personas indefensas y con el agravante que lo comete la propia autoridad policial. No hay nada que celebrar, pero esto es la Conmebol y nada nos debe extranar.
Anónimo: tu pasado y anonimato no suman. Esto es hoy.
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