Pelé pintado por Andy Warhol.

Hoy (06.08.2015) Andy Warhol cumpliría 87 años. Murió a los 58 en Estados Unidos y supo dejar huella, cuya valoración sacará cada cual según su recepción.

Queda en los libros y las cintas como uno de los precursores del Pop Art, carrera artística que insufló a partir del culto a la personalidad y el snobismo, cualidades por las que se lo destaca como visionario: “Todos tendrán sus quince minutos de fama”, dijo (ya en los 70s) en relación a la multiplicación de los medios.

Así, con acciones polémicas, estrafalarias, escandalosas y cargando su look de histrionismo y excentricidad, se dedicó a enlazarse con actores, intelectuales, celebridades y aristócratas de modo de enlazar sus conocimientos en arte plástico.

«Hacer dinero es arte, y el trabajo es arte, y un buen negocio es el mejor arte.»

Así, hizo su paso de ilustrador a artista cotizado, haciendo gala y movimiento de su homosexualidad en tiempos menos tolerantes que los actuales sin ahorrarse enormes cuotas de cinismo aristocrático:

“Lo que es genial de este país es que Estados Unidos ha iniciado una tradición en la que los consumidores más ricos compran esencialmente las mismas cosas que los más pobres. Puedes estar viendo la tele, ver un anuncio de Coca-Cola y sabes que el Presidente bebe Coca-Cola, Liz Taylor bebe Coca-Cola y piensas que tú también puedes beber Coca-Cola. Una cola es una cola, y ningún dinero del mundo puede hacer que encuentres una cola mejor que la que está bebiéndose el mendigo de la esquina. Todas las colas son la misma y todas las colas son buenas. Liz Taylor lo sabe, el Presidente lo sabe, el mendigo lo sabe, y tú lo sabes”.

De cómo Pelé llegó a formar parte de sus pinturas también cuenta sobre el estilo Warhol que supo convertir en arte una lata de sopa Campbells. En esa línea de tomar lo popular (Lennon, Jagger, Monroe, etc.), no obviar lo kitsch y bajar el arte a consumo también cayeron los deportistas.

Warhol comenzó a pintar retratos por encargo a comienzos de los años 60. Estas obras se convirtieron en un aspecto importante de su carrera, y fueron una de sus principales fuentes de ingreso en la década de 1970. Muchas de las personas que retrató eran conocidas en círculos sociales internacionales, el mundo del arte y la industria del entretenimiento de aquella época.

Comenzaba sus retratos por encargo con una fotografía tomada con una cámara Polaroid. La cámara Polaroid permitía una imagen de muy alto contraste, que Warhol agrandaba y trasladaba a una serigrafía. Cada retrato está “pintado por debajo” primero, luego trazaba sencillos contornos de la imagen fotográfica en el lienzo e introducía formas de color. Una vez que esta capa de pintura inicial secaba, imprimía la imagen fotográfica serigrafiada sobre ella.

“The Athletes Series” (1978) también llegó por encargo (para eso trabajó toda su vida). Richard Weisman encargó y salieron diez pinturas de deportistas famosos (O.J.Simpson, Muhammad Alí, Chris Evert, Willie Shoemaker, Dorothy Hamill, Jack Nicklaus, Tom Seaver, Karem Abdul-Jabbar, Rod Gilbert y Pelé) que hoy se cotizan, en lote, en u$s 5.5 millones.

Consustanciado y festejante del estilo estadounidense (para él, centro del mundo) las estrellas retratadas son (sólo) íconos estadounidenses nativos salvo en dos casos: el canadiense Rod Gilbert y el brasileño Edson Arantes do Nascimento.

Pues el honor de ser seleccionados por el excéntrico neoyorquino Warhol se basa en que el canadiense dispuso las habilidades de su hockey sobre hielo para los Rangers de Nueva York y que Pelé parece haber llegado a su conocimiento por su estadía en el New York Cosmos (1975-1977). Weisman, el comisionista, comentó que Warhol no sabía la diferencia “entre una pelota de fútbol y una bola de golf”.