Un globo azulgrana en lo más alto.

TORNEO CLAUSURA 07 - FECHA 17

En el shopping mall una niña se hizo de un globo azulgrana. El padre quiso negarse pero finalmente se lo compró.
En el shopping mall hay una suspensión del tiempo y del espacio, un distanciamiento del clima e incluso de la realidad. Hay al mismo tiempo una sobrecarga de sonidos e islas de calma.
En el shopping mall se suministra una aparente sobredosis de comunicación visual, de estímulos sonoros y mezcla de olores.
En el shopping mall, siempre de límites imprecisos, cualquiera puede encontrar, sin riesgos, la ciudad del descubrimiento y de la aventura.
En ese caos de los sentidos, el globo se soltó de la mano de la niña. Ella lloró, por el globo y por la advertencia del padre. ¿Y por qué sube el globo? Porque el gas que lo infla es más liviano que el aire. ¿Y cuando para? No para, si nada se interpone, no para, sube y sube. Así, el globo azulgrana sólo fue detenido por el techo, en lo más alto del shopping mall.
En el shopping mall cualquiera puede encontrar la ciudad del descubrimiento y de la aventura, Rácing puede bailar a Estudiantes, errar un penal, hacer su mejor juego y disfrutar la aventura de ganarle 2 a 0. A Estudiantes que, días atrás, en una sobrecarga de ánimo, le ganó a River en su mejor partido.
En el caos del shopping mall hay lugar para el extravío y el desencuentro: Boca puede dejar la mitad de sus aspiraciones como elefante en su cementerio*. Colón, debatiéndose en la mitad de la tabla y estrenando DT lo bajó del torneo (2-1). Russo salió con suplentes (?) y puso a los titulares tarde.
El shopping mall está pronto a cerrar. Allá está el globo azulgrana, en lo más alto, le alcanza con no interrumpir la subida (1-1 con Argentinos Júniors). ¿Y por qué sube? Sube, si nada se interpone, sube y sube. Acaso el shopping mall y el fútbol sean un estado de ánimo.

Pueden verse las posiciones del torneo, a dos fechas de su culminación, en el menu de la derecha (superior).

* CEMENTERIO DE LOS ELEFANTES es la denominación que recayó sobre el estadio de Colón de Santa Fe precisamente por ver caer a grandes.