31.05.2011 - Abonados a la sección y como si fuera editada por Diego Maradona, seguimos con las contratapas de arqueros.
Revuelo en el (predio) 19 de Mayo de Ciudad Evita (donde son locales las inferiores de Boca). Víctor Hugo Civarelli, entrenador de la 6º, que venía suspendido de su cargo desde el 21 de mayo, fue echado con sumario interno del Departamento de Asuntos Jurídicos del club.
"Yo no tengo vuelta en la vida. Detrás mío tengo familia e hijos", dice el otrora arquero leproso (que juntábamos en figuritas).
“Conducta incorrecta” es el término protocolar que trata de poner en palabras legales el pico que don Víctor (55) le estampó a un jugador de la sexta (16) como festejo de su gol en el partido en que Boca venció a Instituto. Los goles fueron de Parodi (2), Mana, Martini, Celeste (2) y Casimiro y Boca ganó 7-2.
“El entrenador está separado preventivamente de su cargo por su manejo del plantel en la división en la que se desempeñaba”, confirmó Pedro Orgambide, encargado del Departamento de Fútbol Amateur de Boca.
“Si hacés un gol, te doy un ‘pico”, le habría dicho a uno de sus delanteros que hacía un año no convertía. El delantero mojó y Civarelli cumplió su última tarea motivadora al frente del plantel de la 6º (ya el siguiente partido frente a Sportivo Italiano 4-2, lo tuvo afuera, suspendido).
La dirigencia dejó el caso en stand by hasta que hoy decidió cesar a Víctor Hugo Civarelli después de 15 años en el club (llegado en 1996 de la mano de Jorge Griffa y en su mejor momento como entrenador de arqueros de 1º en el cuerpo técnico de Jorge “Gargajo” Benítez).
"Me sorprende, pero todo quedó en una joda. Fue una joda sana. Nunca quedé tan desubicado en mi vida como ahora… No hablé más con el chico. Hablo personalmente con ellos por los problemas que tienen. El chico está muy triste."
"Tengo las cosas claras en la vida. Sé que el chico está mal, pero no le voy a pedir que salga a defenderme. Jamás me tomé en serio todo esto. Lo que más me duele de todo esto, es que detrás están mis hijos".
Después siguió aclarando que "el juvenil no me llegó a besar en la boca, fue sólo una joda", y más tarde (o más temprano) aseguró que "fue una pavada, no podemos andar a los besos con un chico. Me habían suspendido, pero me terminaron diciendo que me vaya".
¿Acaso la dirigencia tomó cartas en el asunto previendo los festejos de una sexta campeona?
.
.
1 comentario:
hay muchas formas de festejar goles y le creo al gringo q non fue mas q una joda lo conosco y creo q le estan haciendo un gran mal a una gran persona detras de el hay una familia no se confundan gringo te banco el loco demente
Publicar un comentario