El clásico más explosivo del fútbol argentino terminó con victoria visitante. En su estadio, Marcelo Bielsa, Newells Old Boys cayó (0-1) vs Rosario Central. El gol lo hizo Marco Ruben a los 23 minutos del segundo tiempo y, en un estadio repleto, nadie lo gritó puesto que sigue vigente la prohibición de asistencia al público visitante en los partidos de Primera División del fútbol argentino.
En este marco (Ruben), un asistente al estadio fue señalado como hincha visitante infiltrado (de Rosario Central) y terminó golpeado y despedido a la calle totalmente desnudo (ver foto).
Pero los coletazos del clásico rosarino siguieron adelante y se iniciaron, incluso, antes del comienzo del partido. Entonces, minutos antes del pitazo inicial, un colaborador de Newells ingresó al campo de juego con la orden de tapar un pozo en el césped que estaba lleno de agua. El hombre, Carlos Luna, que trabaja ad honorem para el club desde hace 12 años, fue con la mejor de las voluntades y la peor de las ideas, a cargarse arena en una frapera para descargarla sobre el pozo a la vista de un estadio colmado.
Se supo, días después de terminado el partido, que Carlos Luna fue despedido (o invitado a no ir más) del club por las burlas recibidas al ingresar con una frapera llena de arena al verde césped de Newells.
Días después, cuando Maxi Rodriguez comparecía ante los micrófonos y el presidente interino del club, Jorge Ricobelli, pedía disculpas públicas por la derrota ante el clásico rival, centenares de hinchas de Newells se reunieron en repudio en las inmediaciones del estadio para terminar marchando a la casa particular del presidente, pedir elecciones, propinar cataratas de insultos y pintarle todo el frente del domicilio con leyendas como “entregador” o “Ricobelli cagón”…
Días después el plantel de Newells Old Boys volvió a los entrenamientos pero la dirigencia decidió cambiar el horario pautado, hacerlo a puertas cerradas y con custosia policial en la puerta del club.
También se supo, días más tarde, que el abogado del hincha agredido identificado como hincha de Rosario Central, contó que su defendido no sólo no es hincha de Central sino que lo señalaron para robarle el celular y que además de quedar desnudo en la calle, tiene golpes en la cabeza, en el rostro, pérdida de varias piezas dentales, golpes en las costillas, en las piernas y entorsis en uno de sus tobillos. Que por todo eso iniciará acciones legales contra Newells, la AFA y la Provincia de Santa Fe.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario